martes, 8 de diciembre de 2009

Precisión tonta

Una tonelada de CO2 cotiene 1,3*10^28 moléculas de CO2 (esto es un 1,3 seguido de 28 ceros). Vamos, un montón. Una tonelada de carbono contiene 5*10^29 moléculas, otro montón. Mayor. Concretamente, 3,6 veces más moléculas (bueno, átomos en este caso).

¿A qué viene esto?

Nada, es que muchas veces se habla de toneladas de carbono o toneladas de CO2 como si fueran lo mismo. No, una tonelada de CO2 contiene 272 kg de carbono.

No nos confundamos.

jueves, 3 de diciembre de 2009

¿Preferimos un mal acuerdo a una ausencia de acuerdo o al revés?

Anchoring es un término inglés que se debería de traducir por anclaje, aunque aún no esté en el diccionario de la RAE. En psicología, se refiere a la importancia desmedida que solemos darle a ciertos eventos. Por ejemplo, cuando uno negocia el precio de compra de una casa, siempre se parte del precio incial y se intenta rebajar. En este sentido, se dice que el primer precio actúa de ancla (podríamos negociar desde cero, p.ej., pero no lo hacemos).

A la hora de analizar la historia o incluso la actualidad, uno debe de tener consciencia de este sesgo cognitivo. Es decir, de lo que todos hacemos sin darnos cuenta. Por ejemplo, la consitutición europea actúo como punto de anclaje. Todo lo demás se define en comparación a la constitución europea, se rebaja o se amplía, pero seguimos anclados en el mismo modelo mental.


Estos últimos días, con razón de la cumbre de Copenhagen, he leído opiniones a favor y en contra de un acuerdo. Vamos por partes. El titular de hoy de El Pais es tremendo: Uno de los científicos del clima más destacados prefiere que la cumbre de Copenhague fracase. En él se dice que James Hansen, un físico de la NASA, muestra su preferencia por una ausencia de acuerdo antes que por un mal acuerdo. Para él, los parámetros en que se mueve la discusión son realmente escasos y cree que una ausencia de acuerdo puede tener el efecto de cambiar el paradigma. Considera que COP15 va en la mísma línea que Kyoto y que va a tener la misma eficacia (demasiado baja, a su entender).

Por otro lado, en Technology Review, leo como economistas de Columbia se muestran favorables a un acuerdo, cualquiera, por la certitud que daría. Porque serviría de punto de anclaje focal a muchas iniciativas. El artículo cita el ejemplo de Vestas, que está estudiando ampliar su capacidad de I+D y la condiciona a un acuerdo.

Ciertamente, ambos llevan su parte de razón. Caso de llegar a un acuerdo, Copenhagen no va a cambiar el modelo de Kyoto de manera sustancial. Sin emabrgo, si no se llega a un acuerdo, ¿será posible algo a posteriori? Un acuerdo daría una poderosa señal de voluntad conjunta de actuar, aunque fuera aguada. Ciertamente, complejo.

En mi caso, yo soy más de la sabiduría popular, "más vale pájaro en mano". Para mi, un acuerdo aunque sea malo, es mejor que nada. Actuaría como un faro y punto de referencia para señalar el cambio climático como un problema importante y al que hay que poner coto. Y establecería un marco de referencia. Si se firma, en 10 años, en EE.UU. tendrán con qué comparar sus emisiones de CO2 y de qué avergonzarse. Si no hay acuerdo, esto no sucederá y puede que la presión mediática se diluya como un azucarillo.

Claro que preferiria un acuerdo valiente y agresivo. Pero como ésto no es posible, prefiero un acuerdo mediocre a la falta de acuerdo. Me parece peor alternativa e incluso un poco iluso pensar que se podrá llegar a un mejor acuerdo en 2010 o 2011.